Rebeldes sirios.
Aviones de combate sirios bombardearon el domingo el campamento palestino de Yarmuk en las afueras de Damasco y causaron la muerte de 25 personas que se refugiaban en una mezquita, en un área desde donde los rebeldes han estado intentando avanzar hacia la capital, dijeron activistas de la oposición.
El ataque es parte de una campaña de un mes lanzada por las fuerzas del presidente Bashar el Asad para expulsar a los rebeldes que buscan derrotar al Gobierno y capturar Damasco. Se produjo un día después de que aeronaves militares bombardearan a los insurgentes en una carretera que lleva al aeropuerto internacional de la capital siria.
Yarmuk, situada en los márgenes de Damasco, está dentro de una franja periférica de territorio que va desde el este al suroeste de la capital siria desde donde los rebeldes buscan ingresar al principal reducto de poder de la familia Asad, que ha gobernado Siria en los últimos 42 años.
En la última de una serie de instalaciones militares en caer en manos de los combatientes, la institución de infantería del Ejército situada en el norte de Alepo fue capturada el sábado tras cinco días de combates, dijo un comandante rebelde de la poderosa Brigada Tawheed, un grupo islamista.
Activistas de oposición dijeron que las muertes en Yarmuk, hacia donde habían escapado civiles y refugiados tras enfrentamientos en suburbios cercanos, se produjeron cuando un proyectil disparado por un avión militar impactó en la mezquita.
Un vídeo divulgado en YouTube mostró cadáveres y partes de cuerpos regados por una escalera de lo que parecía ser la mezquita.
El número de muertos en el último incidente de violencia no pudo ser verificado de manera independiente debido las restricciones que aplica el Gobierno sirio a los medios.
Ataque aéreo
Se trata de la primera información sobre un ataque aéreo en Yarmuk desde que comenzó la revuelta popular contra Asad hace 21 meses, la cual derivó en una guerra civil con una insurgencia armada a partir de protestas callejeras que fueron duramente reprimidas por las tropas del Gobierno.
Siria acoge a más de 500.000 refugiados palestinos, la mayoría de los cuales viven en Yarmuk, y tanto el Gobierno de Asad como los rebeldes musulmanes suníes han reclutado y armado a palestinos.
Los intentos combates surgieron hace 12 días entre palestinos leales a Asad y los rebeldes sirios, apoyados por un grupo de combatientes palestinos conocido como la Brigada Liwaa al-Asifah.
Activistas de la oposición y el Observatorio Sirio de Derechos Humanos - un movimiento de seguimiento de la revuelta con sede en Londres - dicen que muchas familias estaban tratando de escapar de los combates en el campo de Yarmuk.
Se estima que al menos 40.000 personas han perdido la vida en Siria desde que comenzó el conflicto.
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